miércoles, 28 de julio de 2010

conviértete en pipas

Seres humanos cultivaban el girasol 1000 años antes de que otros seres humanos sembraran de dioses la tierra. Así, antes de que la vida se abrasara con vistas prometidas a otra vida en el cielo, la vida del girasol quemaba sus días para convertirse en algo que seguía aquí, nutriendo a quien por él pasara. Aristarco de Samos se adelantó 1800 años a lo que Copérnico primero y Galileo después dirían del sol como centro de nuestro sistema solar (llamado por ellos universo). Fue éste último quien escogió mirar para otro lado para no arder en las hogueras encendidas por la iglesia católica. Pero el girasol aún estaba, aquellos días, por traer a europa desde el continente americano. Este es un blog sobre viajes que escogen esta vida, este sol y sus frutos. Estos pies no se mueven, el resto sí.