Mientras la política diseña y habita los pantanos, la ingeniería diseña puentes para atravesarlos. Y lo que uno asume como aprovechamiento obvio de su geografía al recorrer su urbanismo de calles anchas y jardines planísimos, es asombro por la aparente naturalidad del esfuerzo de ingeniería que eleva carreteras en el sur de Lousiana y las conduce durante decenas de kilómetros y miles de pilares a través de las tierras pantanosas. Inserto, como el propio capitalismo, en un ecosistema de cocodrilos, sirve para calibrar esa rareza: cómo el país construído sobre las libertades individuales ha construído su grandeza sobre un esfuerzo colectivo alimentado por una gasolina mejor que la que hoy desplaza su aberrante forma de malgastarlo.
viernes, 26 de agosto de 2011
puente sobre sociedad turbulenta
Mientras la política diseña y habita los pantanos, la ingeniería diseña puentes para atravesarlos. Y lo que uno asume como aprovechamiento obvio de su geografía al recorrer su urbanismo de calles anchas y jardines planísimos, es asombro por la aparente naturalidad del esfuerzo de ingeniería que eleva carreteras en el sur de Lousiana y las conduce durante decenas de kilómetros y miles de pilares a través de las tierras pantanosas. Inserto, como el propio capitalismo, en un ecosistema de cocodrilos, sirve para calibrar esa rareza: cómo el país construído sobre las libertades individuales ha construído su grandeza sobre un esfuerzo colectivo alimentado por una gasolina mejor que la que hoy desplaza su aberrante forma de malgastarlo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Cuidao qué puente más feo!!
ResponderEliminarja, ja
ResponderEliminara mi me gusta... hay varios así por aquí... quizá uno les toma cariño :P